Presentación del blog "Violinistas en el Tejado"

 

La creación de este blog tiene como propósito general ser un punto de reunión tanto para estudiantes como para colegas, amigos, melómanos o visitantes espontáneos en el cual compartir información, inquietudes, opiniones y, en definitiva, la pasión común por la música y por tan bello instrumento como es el violín. 

Sin embargo, como profesional de la educación, debo mencionar que este blog espera ser, sobretodo, una herramienta interactiva que sirva para estrechar lazos e implicar en el proceso educativo a todos los miembros de la comunidad educativa (profesores, padres/madres y alumnos) del C.E.M. "Leopoldo Torrecillas Iglesias", con el fin de mejorar la calidad de la educación aprovechando las posibilidades que las nuevas tecnologías de la información y la comunicación nos ofrecen. 

Quisiera aprovechar la oportunidad para hacer una doble dedicatoria del blog:

• Primero, y como razón de ser del blog, quisiera dedicárselo a mis queridos alumnos así como a sus padres y madres, invitándoles a tomar parte activa en él para crear un espacio vivo en el que podamos disfrutar de la música y aprender los unos de los otros, todos juntos. 

• Segundo, y no menos importante, lo dedico a mi familia, siempre ahí, sin la cual servidor nunca podría haberse imaginado escribiendo desde tan privilegiada y noble posición; la de poder ocuparse y preocuparse por la educación musical de los jóvenes.

Continuando con la presentación, y cambiando un poco de tema, el título del blog "Violinistas en el Tejado" se me antoja poco original, al menos para la gente de mi generación o anteriores (leáse, padres y madres de alumnos). Pues lo que Luciano Pavarotti (el tenor gordo de la barba y el pañuelo blanco) es al bel canto a niveles de repercusión en el conocimiento popular, "El Violinsta en el Tejado" lo era al violín, prácticamente. Digo era, porque quizá para los más jóvenes esta frase ya no esté tan acuñada. Curioso, aún así, como un personaje ficticio sin nombre y sin cara pudo acabar siendo tan ilustre y conocido por todos.

Para que los más jóvenes salgan de su desconcierto, comentaré un poco como va la historia. 

Recuerdo que en mis años mozos, cuando empezaba a aprender a tocar el violín, allá por los años 90 (sí chicos, sí, en el siglo pasado), familiares, amigos de mis padres y quién no, a menudo me saludaban con un efusivo: -¿¡Cómo estás, violinista en el tejado!?-

Por aquel entonces no sabía muy bien de qué me estaban hablando, ni podía entender que tenían que ver los violinistas con los tejados, ni cual podía ser la gracia de ponerse a tocar allá arriba con el consiguiente riesgo que uno corría de darse un más que probable coscorrón.

Finalmente, me revelaron que la expresión procedía de una película del mismo nombre. 

Sin ánimo de contar demasiados detalles de la película a quien no la haya visto, diré que este ilustre violinista anónimo nos deleita al principio de la película con un solo poético y animoso interpretado desde las alturas del tejado de una casa en una zona rural de Rusia. 

En realidad, pasaron años hasta que tuve la oportunidad de hacerme con una copia de la película. Cuando finalmente la vi, unos diez años después, me quedé un poco desilusionado con la película, ya que el violinista aparece solo brevemente. 

Supongo que desde pequeño alimenté la falsa fantasía de que, como no podía ser de otra manera, la película iba a girar en torno al violinista, por supuesto. Al fin y al cabo ese era el título de la película, ¿no?: "¡¡¡El Violinista en el Tejado!!!

No obstante, una vez superada la desilusión provocada por tamaño desengaño, la película es, en realidad, un musical precioso para toda la familia que bien merece la pena ser visto.

Así que de ahí chicos viene el nombre del blog, pero como somos tantos pensé que sería mejor ponerlo en plural: "VIOLINISTAS en el Tejado". ¿Qué os parece?

No sé si os animaréis a ver la película algún día, pero yo de momento os dejo un enlace a un vídeo del YouTube en el que podréis escuchar el solo del violín:

¡¡¡Espero que os guste!!!!

Por cierto, podría ser que el violinista que interpreta el solo, sí tuviera un nombre y unos apellidos, en realidad. 

A ver si alguno es capaz desvelar la identidad de este violinista anónimo y misterioso...

¡¡¡Espero vuestras respuestas!!!